Me siento como un arbol cuando corre el raco...
Es una sensación tan extraña (al igual que esta paradoja),
porque en los segundos previos de que venga ese vendaval de viento, aquel árbol
se encuentra tranquilo en su lugar, con sus hojas moviéndose, bailando al son
de leves brisas, y en el momento más inesperado, (o justamente cuando el árbol
lo veía venir, pero aun no estaba preparado), esta ráfaga de viento lo
estremece, acercándose con apariencia noble, por su tibieza, pero finalmente el
caos lo produce igual haciendo que aquel árbol se mueva inevitable y
obedientemente, según el raco se le antoje,
estremeciéndolo desde sus raíces más profundas, hasta la hojita recién
brotada…justamente en mi vida, el raco está pasando, y más fuerte que nunca,
como aquellos días de otoño, cuando queda algo de la tibieza de la primavera,
pero el raco termina llevándoselo todo, y generalmente, después de este “cálido
viento”, viene la lluvia; por eso digo que es una sensación extraña, porque
nose si agradecerle al raco por prepararme antes de que llegue la lluvia, o
odiarlo, por llevarse la tibieza de aquellos momentos (que solo tú sabes cuales
son…), nose en que posición ponerme, porque, al igual que el árbol, creo que en
mi vida, veía venir al raco, pero aún así no estaba, ni estoy lista para
afrontarlo; en este preciso momento de mi vida, el raco está pasando, aun no
llega la lluvia, solo está empezando a caer el rocío por las mañanas, pero creo
(y estoy absolutamente segura de ello), que la mejor manera de afrontar todo en
esta vida, es viéndole el lado “positivo”, y tratando de aprender de ello, es
por eso, que en un principio odie el raco, porque apareció con su calidez, haciéndome
creer que la decisión que tomaría, no sería tan dura, ni difícil (y esto se
puede utilizar como ejemplo para cualquier decisión que uno tome en la vida, no
solo en mi caso puntual), pero con el transcurso de aquel viento, sentía que mi
mundo cada vez se estremecía mas, y que incluso mis raíces (aquellos
pensamientos o ideologías características) se comenzaban a mover, no a
soltarse, ni arrancarse del suelo estable, pero si a moverse, pero pensando lo
mas maduramente posible, me di cuenta lo agradecida que estoy, de este
incomprendido y fuerte viento, ya que de alguna manera, me ayuda a estar preparada, y me avisa que la
lluvia vendrá, pero principalmente, porque la mejor forma de aprendizaje (en
todo ámbito de la vida) es aquel que implica esfuerzo y sacrificio, o si no,
que merito tiene???
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